Varios feligreses de la Iglesia San Martín de Porras realizaron una santa procesión alrededor del Estadio Nacional, haciendo plegarias a Dios y todos los santos para que la paz reine en los estadios hondureños.
«Hemos venido a hacer la procesión porque comprendemos que se puede sentir amor por un equipo pero lo que no es correcto es que haya violencia» dijo entre líneas el padre Carlos Rubio.
Además, Rubio dijo que ellos tienen la confianza en que Dios los escucha y que debemos mantener la mirada en el bien común de Honduras. SA