La dueña tuvo que abandonar su vivienda, en Nueva Zelanda, tras aparecer de repente en su patio trasero un gran cráter que además no paraba de crecer y lanzar barro al aire.
Susan Gedye, residente de la ciudad de Rotorua, en Nueva Zelanda –que es conocida por su actividad geotérmica-, se llevó un gran susto al descubrir que en su patio trasero se había abierto de repente un enorme y humeante cráter de barro.
Según informan los medios locales, el hecho se produjo en la noche del 26 de junio. «Me desperté alrededor de las 2 de la noche, pensando que estaba ocurriendo un gran terremoto, hubo muchos temblores y sacudidas», relató la mujer a la prensa, agregando que también vio por las ventanas mucho vapor.
Al mirar hacia su patio, la neozelandesa se dio cuenta de lo que realmente acababa de pasar: allí vio «un gran géiser saliendo del suelo». Al principio, los especialistas le aseguraron a Gedye que su seguridad no corría riesgo. Sin embargo, por la mañana vio que aquello «se había convertido en un enorme géiser de barro», con el «lodo volando a unos 10 metros en el aire». En poco tiempo, se hizo «tremendamente» más grande.
Entonces fue informada de que había también un hoyo bajo su cocina y que esta podía hundirse en cualquier momento, con lo que tuvo que mudarse a casa de su padre.