Trece cámaras del Sistema Nacional de Emergencias 911 fueron destruidas por presuntos manifestantes este día.
Las cámaras son una herramienta muy eficiente para brindar seguridad y asistencia a la ciudadanía, algunos malos hondureños creen que destruyendo estos dispositivos podrán evadir la justicia y reivindicar su causa.
Las cámaras del 911 están dotadas de herramientas de reconocimiento facial, por lo que ya está en poder de las autoridades la identidad de estas personas inescrupulosas.
Algunos ya fueron detenidos y remitidos al Ministerio Público para que les deduzca la responsabilidad de ley.
La destrucción de las cámaras de vídeo vigilancia del 911 es un delito y se castiga con penas de 3 a 6 años de reclusión.