México.- Un anciano que tenía a su perro agonizando decidió desesperado acudir a un hospital de humanos en Puebla, México, para que atendieran a su pequeño can.
El hombre llegó hasta un hospital de Huejotzingo cargando en un morral de rafia a su mascota.
Aturdido por la situación no reparó en que el nosocomio está dedicado solo al cuidado de las personas y pidió ayuda al personal médico que trabaja allí.
El médico que lo recibió estaba a punto de negarse y decirle que para eso estaban los veterinarios, pero al ver los ojos de tristeza del viejito no pudo decirle que no y decidió ayudarlo, de acuerdo a lo reportado por varios medios locales.
“Tiene diarrea, está desguansado y no quiere comer. Apenas toma agua, se queja bajito y está muy tristito”, les dijo a los médicos el compasivo viejito, según el sitio Amigos de Lucho.
Luego, el señor con toda humildad les dijo a los médicos que “cuánto iba a costar la consulta” y les suplicó que ayudaran a su perrito.
Según reportó este medio local dedicado a los animales en la ciudad de Puebla, los médicos se reunieron para decidir qué hacer, y entre todos hicieron una evaluación de lo que podía estarle pasando al perrito.
“Estaba deshidratado y parecía tener una infección o un virus. Le dieron antibióticos y lo hidrataron con electrolitos. Por supuesto no le cobraron la consulta al señor”.
El anciano se puso a llorar.
Al ver las lágrimas de emoción del viejito porque estaban ayudando a su perro, los médicos le dijeron que si el animal no mejoraba lo llevara nuevamente con ellos.
El anciano salió del hospital con su cachorro en los brazos, “con una sonrisa y feliz al haber sido escuchado y sobre todo al ver que su mascota estaba mejor”.
Los hechos ocurrieron en un pueblo de México llamado Huejotzingo, y la historia fue contada por uno de los médicos que trabaja en el hospital de la zona.