Elysia Downings admitió que utiliza vibradores desde que tenía 13 años, lo que le ha generado una adicción, la cual le impide tener una pareja.
La cifra que ha gastado en juguetes sexuales alcanza los 4 mil dólares, afición que no es del agrado de muchos hombres, por lo tanto, no es capaz de encontrar el amor de su vida.
“Ellos tienen que aceptar que cualquier cosa con baterías siempre hará el trabajo más rápido y más eficientemente”, dijo Downings a la publicación de The Mirror.
Además narró que uno de sus novios lanzó los artefactos por la ventana al darse cuenta que ella los usaba durante su ausencia.
Al menos 10 veces, la mujer utiliza los artefactos y hasta despierta pensando en ellos, es por eso que se define como “hipersexual”.
Cuando no experimenta un orgasmo se pone de mal humor y lo dice sin falso pudor: “A algunas mujeres les gustan los zapatos o los bolsos; a mí me encantan los juguetes sexuales”.
Su adicción comenzó en su temprana adolescencia, cuando encontró en la masturbación un escape para evadir la realidad difícil de su hogar y su familia. En ese entonces no tenía dinero para comprar juguetes, así que usaba aparatos que había en su casa, como masajeadores o cepillos de dientes.
Cuando a los 17 pudo comprarse su primer juguete, supo que no había vuelta atrás. El vibrador más caro que posee es uno por el que pagó $130.
Downings señala que lo que más le gusta de sus juguetes es que puede explorar su propio cuerpo con entera libertad y comodidad: “No juzgarán mi cuerpo desnudo ni me harán sentir cohibida. No me engañarán ni romperán mi corazón. Además tengo el orgasmo garantizado”.
Al viajar, lo hace con algunos artículos de su colección y cuando pasa días enteros fuera de casa, lo primero que hace al llegar es usar sus juguetes que además alivian su estrés y sus tensiones.
“He conocido a hombres que encuentran atractiva mi afición, pero a la mayoría le resulta desagradable. Mi hombre perfecto está en alguna parte, pero por ahora soy feliz sin uno”, finaliza la también madre de un pequeño de seis años.
