El papa Francisco y el gran imán de Al Azhar (El Cairo, Egipto), Ahmed Al Tayeb, han firmado este lunes un histórico documento conjunto para combatir el extremismo, promocionar la paz y aproximar a cristianos y musulmanes.
En ese ‘Documento sobre la hermandad humana por la paz mundial y la convivencia común’ que han ratificado en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos), ambos líderes niegan rotundamente que las religiones inciten a la guerra y el extremismo o soliciten sentimientos de odio y hostilidad.
Jorge Mario Bergoglio y Ahmed Al Tayeb señalan que esas «desventuras» son fruto de «la desviación de las enseñanzas religiosas, el uso político de las religiones e incluso de las interpretaciones de grupos de hombres de religión», con lo cual que llaman a que «dejen de instrumentalizar las religiones para incitar al odio, la violencia, el extremismo y el fanatismo ciego».
Asimismo, exhortan a que nadie se base en Dios para «justificar actos de asesinato, exilio, terrorismo y opresión», porque «no necesita ser defendido por nadie y no quiere que su nombre sea usado para aterrorizar a la gente», con lo cual instan a «interrumpir» el abastecimiento de «dinero, armas» y hasta «cobertura mediática» a esos «crímenes internacionales que amenazan la seguridad y la paz mundial».
Por este motivo, el sumo pontífice y el alto clérigo sunita piden a los líderes mundiales que se comprometan a «difundir la cultura de la tolerancia, la convivencia y la paz», así como a «intervenir lo antes posible para detener el derramamiento de sangre inocente y pongan fin a las guerras, los conflictos, la degradación ambiental y el deterioro cultural y moral que vive el mundo».CORTESÍART