Inesperado como siempre, el hombre más rico del mundo habló solo cinco minutos y dejó un mensaje compuesto por once reglas para los jóvenes estudiantes. Terminó, no esperó al agasajo previsto, tomó su helicóptero y se marchó a su oficina. Los aplausos de los asistentes, duraron más de diez minutos. Las reglas son:
Regla 1: La vida no es fácil: Acostúmbrese a eso.
Regla 2: El mundo no está preocupado por la autoestima de ustedes. El mundo espera que ustedes hagan alguna cosa útil por él antes de sentirse bien con ustedes mismos.
Regla 3: Ustedes no ganarán 200.000 dólares al año nada más al salir de la universidad. Ustedes no serán vicepresidentes de una empresa con limusina a su disposición, hasta que ustedes no hayan conseguido comprar su propia limusina.
Regla 4: Si ustedes consideran a su profesor duro, esperen a tener un jefe.
El no tendrá compasión de ustedes.
Regla 5: Vender periódicos viejos o trabajar durante los festivos no está por debajo de su posición social. Sus abuelos tienen una palabra diferente para eso: Lo llaman oportunidades.
Regla 6: Si ustedes fracasan no es culpa de sus padres. No lamenten sus errores: Aprendan de ellos.
Regla 7: Antes de que nacieran ustedes, sus padres no eran tan críticos como ahora. Ellos se volvieron así por pagar sus cuentas, lavar sus ropas y oírles decir que ellos son ridículos. Antes de querer salvar el planeta para la próxima generación, queriendo corregir los errores de la generación de sus padres, tienen que limpiar su propio cuarto.
Regla 8: Su universidad puede haber eliminado la distinción entre ganadores y perdedores, pero la vida no es así. En algunas universidades, ustedes no repiten más de un año y tienen las oportunidades que precisan para acertar.
Eso no se parece absolutamente nada a la vida real. Si metes la pata estás despedido: ¡A la calle! Esto es cierto desde la primera vez.
Regla 9: La vida no está dividida en semestres. Ustedes no siempre tendrán los veranos libres y es poco probable que otros empleados les ayuden a cumplir sus tareas al final de cada período.
Regla 10: La TV no es la vida real. En la vida real las personas tienen que dejar la juerga y la diversión e ir a trabajar.
Regla 11: Sean amables y cordiales con los destacados, aquellos estudiantes a los que los demás juzgan como sapos. Existen muchas probabilidades de que ustedes vayan a trabajar para uno de ellos.