River Plate se coronó campeón de la Copa Libertadores tras vencer por 3-1 a Boca Juniors en el duelo disputado en tierras españolas.
Un mes exacto pasó desde el partido de ida, y por eso las expectativas por este partido eran bastante latas.
Durante el primer tiempo los dirigidos por Guillermo Barros Schelotto arrancaron el partido de mejor manera en base al contrataque y pierna dura en mitad de terreno.
Fue gracias a esa modalidad de juego que Boca llegó a la apertura de la cuenta tras una gran jugada del uruguayo Nahitán Nandez quien cedió para Darío Benedetto, se quitó la marca del defensor millonario y definió suave al palo de Franco Armani para desatar los festejos bosteros a los 44 minutos de la primera etapa.
Tras el entretiempo, el equipo de Marcelo Gallardo (que no estuvo en la banca de suplentes) salió con otra actitud y gracias a las constantes ataques por la banda llegó la igualdad a través del excruzado Lucas Pratto (68’) con un potente remate al pórtico de Guillermo Andrada.
Tras la igualdad durante los noventa minutos de partido, se tuvo que jugar el alargue donde al primer minuto llegó la expulsión de Wilmar Barrios (91’) por un duro pisotón sobre un jugador de River Plate. Con esto, el equipo de Barros Schelotto se quedó con 10 hombres durante todo el alargue.
En el segundo tiempo extra, River Plate se puso en ventaja tras una gran definición de Juan Fernando Quintero (109′), luego de una jugada colectiva en la que el volante colombiano probó con un remate de distancia imposible para el portero de Boca.
En el último minuto del alargue, Gonzalo Martinez aprovechó un gran contrataque para decretar el tercer gol del elenco millonario y así festejar el título más importante de su historia.
Pese a los incesantes ataques de Boca Juniors, el juez pitó el final del partido desatando las celebraciones de los hinchas millonarios y sumando así su tercera Copa Libertadores de la historia.
