La multitud de aficionados que seguían por Internet el 12º asalto del Mundial a la espera de grandes emociones sufrieron una gran frustración: Magnus Carlsen ofreció tablas en el momento más tenso, cuando todo podía pasar y con Fabiano Caruana apurado de tiempo. Por primera vez en una historia de siglos, todas las partidas lentas de un Mundial han terminado en tablas (6-6). El desempate se disputará este miércoles en rápidas. El noruego se considera favorito, pero su juego actual en Londres no enamora.
Todo parecía depender de la actitud de Caruana: ¿se conformaría con el éxito parcial de forzar un desempate tras terminar invicto las doce partidas, o estaba dispuesto a arriesgar? La húngara Judit Polgar, comentarista oficial, acertó: “Debe arriesgar, porque sus posibilidades de ganar hoy con blancas son mayores que las de ganar el desempate rápido”. Y el estadounidense lo hizo, repitiendo la incisiva apertura de las partidas octava y décima. Cortesíaelpaís