En ese sentido, expresó que, si bien es cierto el Infop ha mejorado significativamente en los últimos años, esa mejora “no es suficiente para lo que viene para el país”.
Hernández vaticinó que la revolución tecnológica inevitablemente irá sustituyendo las plazas de trabajo, especialmente en el área de las manufacturas.
Por eso, “los tres juntos (Estado, empresa privada y trabajadores) tenemos que revolucionar la educación para el trabajo y la educación vocacional, para estar a la altura de las circunstancias”, estableció.
“¿Va a ser traumático para algunos? Sí –prosiguió-, pero es en el mejor interés de los trabajadores hondureños, de los que quieren entrar en la fuerza laboral y de los que todavía no encuentran espacio”, justificó.
El gobernante aclaró que lo anterior “es con el ánimo de edificar, no con el ánimo de generar una controversia estéril; quiero decirles que soy ferviente creyente de que tenemos que capacitar, formar y educar a nuestro recurso humano”.
“No se me asusten, porque les repito: hablando se entiende la gente, ustedes los del CES (Consejo Económico y Social, integrado por Gobierno, trabajadores y empresarios) han dado la mejor muestra de entendimiento y de conversación productiva”, puntualizó el presidente.