El volcán de Fuego, ubicado a unos 50 kilómetros al oeste de la capital de Guatemala, inició este domingo una nueva, y fuerte, erupción, la segunda este año, con explosiones y provocando una columna de ceniza de más de 11 kilómetros sobre el nivel del mar.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), explicó que la erupción genera flujos piroclásticos -nubes ardientes que descienden del volcán-, en dirección de las barrancas Seca o Santa Teresa y posiblemente a Cenizas.
La ceniza de las columnas de los flujos piroclásticos se desplazan sobre la aldea Sangre de Cristo y el municipio de San Pedro Yepocapa.
Al menos 300 trabajadores de dos fincas ubicadas en las faldas del coloso fueron enviados a sus viviendas con el fin de evitar cualquier incidente, informaron las autoridades.
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) recomendó a la población que vive en los alrededores del volcán que cubra los alimentos y recipientes donde almacenan agua para consumo humano, para evitar cualquier contaminación.
También que utilicen mascarillas debido a la ceniza que cae sobre sus comunidades.
Por la erupción, según la Unidad de Prevención de Volcanes (UPV), se observan pequeñas avalanchas y flujos piroclásticos que descienden por las barrancas Las Lajas y Onda.
El portavoz de la Conred, David de León, explicó que las autoridades de protección civil se mantienen en alerta por la actividad del coloso, de 3.763 meteros sobre el nivel del mar.
Agregó que esta es la segunda erupción del volcán de Fuego en lo que va del año.