Vestido con un vaquero color carne, camiseta blanca y chaqueta azul, Andrés Iniesta firmó este jueves junto a Hiroshi Mikitani su contrato con el Vissel Kobe japonés y posó con la camiseta carmesí de su nuevo club. «Es un día especial para mí. Es un reto importante para mí y para mi carrera. Quiero expresar mi gratitud por confiar en mí en este proyecto. Me apetece mucho empezar a trabajar con mis compañeros. Este es un país que amo. Esperamos, tanto mi familia como yo, adaptarnos prontos y aprender la cultura japonesa», dijo como discurso inicial el ex futbolista del Barcelona.
En la rueda de prensa, apenas se aceptaron dos preguntas. La primera tenía que ver con lo que Iniesta conoce del fútbol japonés: «Tengo mucho respeto por el fútbol japonés y mucho respeto por los jugadores japoneses. Son jugadores inteligentes y con gran nivel técnico». Cuando le preguntaron por su elección, Japón en lugar de China, dijo: «He tenido la suerte de tener distintas propuestas pero el proyecto que me presentó el Kobe fue interesante. También la cultura japonesa me parece maravillosa. Quiero disfrutar de mi vida en Japón. Todo en general, sus persona… Quiero ser uno más en la cultura japonesa».
Hiroshi Mikitani, CEO y dueño de Rakuten así como propietario del Vissel, se mostró «orgulloso» de haber conseguido el fichaje del manchego, un futbolista «inspirador» que les ayudará en su objetivo de convertir al Vissel en el «equipo número uno de Asia». «Es el jugador más respetado del mundo, tendrá un impacto profundo en el desarrollo del fútbol japonés». En el envío de la nota oficial de Rakuten no se especifica de momento el número de temporadas por el que firma el manchego.
El Vissel Kobe es actualmente sexto clasificado a 15 puntos del líder, el Sanfrecce Hiroshima. el Barça también hizo oficial la noticia a través de su página web y destacó que «según los medios japoneses», Iniesta ha firmado un contrato por tres año. Este sábado 26 de mayo a partir de las 10:00 horas en Japón (3.00 a.m en España), habrá un evento de bienvenida en el Noevir Stadium Kobe.