La Unión Europea (UE) aseguró que está preparada para la posibilidad de que Estados Unidos acabe implantando aranceles a su acero y aluminio, aunque aseguró que sea evitar una guerra comercial con el presidente de dicho país, Donald Trump.
El mandatario estadounidense decidió excluir temporalmente a la UE de los aranceles al acero (de 25%) y al aluminio (de 10%) -los cuales son importados a Estados Unidos-, sin embargo, la exclusión temporal termina este martes 1 de mayo y podría no ser renovada.
«No voy a decirle lo que el presidente hará o dejará de hacer, pero le puedo decir que el equipo económico se reúne regularmente», declaró el secretario estadounidense del Tesoro, Steven Mnuchin, asegurando que habrá una «decisión rápida»
La comisaría europea de Comercio, Cecilia Malmström, tenía previsto entrevistarse con el secretario de comercio estadounidense, Wilbur Ross, pero sin esperanza de que la exención de la UE de los aranceles se convierta en permanente, como pide Bruselas.
«Los contactos tuvieron lugar a todos los niveles», afirmó el portavoz de la Comisión Europea, Margaritis Schinas. «Somos pacientes pero también estamos preparados«, agregó.
Varios socios comerciales de Estados Unidos, como Canadá, México y la Unión Europea, también están exentos temporalmente de estos aranceles, pero para seguir estándolo Washington les pide más concesiones.
Es el caso de Corea del Sur, que finamente aceptó reducir sus exportaciones de acero a Estados Unidos y a abrir todavía más su mercado a los automóviles estadounidenses.
«Uno de los problemas es el del tratamiento equitativo de los automóviles y nos gustaría ver concesiones por parte de Europa», sentenció el principal consejero económico de Donald Trump, Larry Kudlow.