Lamentable la noticia que han recibido unos 700 empleados de la alcaldía Municipal de San Pedro Sula un día antes del día del trabajador hondureño los tiran a la calle sin importarle sus necesidades.
Tras la mala noticia decenas de personas han llegado a protestar para que se les de una salida a este trago amargo que están a punto de pasar pues todos son de escasos recursos y dependen del salario que se les paga por recolectar desechos sólidos en la ciudad del norte del país.
La protesta era enérgica en horas de la mañana porque no aceptan este despido ya que ellos aseguran que tenían un empleo permanente por lo cual se espera que en el transcurso del día se les pueda dar una respuesta satisfactoria.