A la hora de adoptar una rutina para el cuidado de la piel debemos tener muy en cuenta de qué tipo es para adaptar el tratamiento a sus características.
La piel es la parte de nuestro cuerpo que se encuentra más expuesta a factores externos del ambiente. A su vez es la encargada de protegernos de estos factores, y por ende sufre día tras día un deterioro prácticamente inevitable.
Ante esta realidad hay algo que podemos hacer para cuidar nuestra piel, y es por esto que a continuación te facilitamos el paso a paso de una rutina de cuidado. De esta manera le darás a tu piel el cariño y la atención que se merece.
Usa esta rutina básica para el cuidado de tu piel
Paso 1: Limpia tu piel 1 o 2 veces al día
Muchos de nosotros solemos limpiar nuestra piel con agua y jabón, toallas húmedas o inclusive solo agua.
Lo ideal es utilizar productos específicos, con composiciones suaves y especializadas para el cuidado de la piel. Además de estos productos, estas son algunas recomendaciones a tener en cuenta para que mantengas tu piel correctamente limpia:
- Debes realizar la limpieza de la piel preferiblemente 2 veces al día. Asegúrate de que una de esas veces sea justo después de levantarte por las mañanas, ya que nuestro cuerpo produce la mayor cantidad de grasa durante la noche.
- Tus manos son el instrumento perfecto para limpiar tu piel. Olvídate de hacerlo con toallas o esponjas, de esta forma evitas que tu piel pueda irritarse.
- Aunque sabemos que es tedioso, nunca dejes de quitarte el maquillaje antes de dormir. De esta forma evitas que la grasa se acumule en tu piel y produzca desgaste durante la noche.
- No limpies tu piel más de dos veces al día, a menos que sea necesario. Si lo haces, estarías sobreestimulando las glándulas sebáceas, por lo que tu cuerpo producirá aún más grasa de lo normal.
- En caso de que tu piel sufra de sequedad, te aconsejamos limpiarla solo una vez al día. Además, es conveniente que utilices productos ideados para este tipo de piel, como los geles limpiadores.
Paso 2: Usa una tonificadora después de la limpieza (opcional)
Las cremas tonificadoras son utilizadas para remover hasta el último rastro de grasa que pueda quedar en nuestra piel. A su vez, estas nos ayudan a cerrar los poros después de una limpieza, de esta forma estaríamos previniendo las infecciones por bacterias.
- En caso de que tengas una piel seca, te recomendamos que no uses este tipo de productos, ya que con el limpiador será más que suficiente.
- Por el contrario, si tu piel es grasosa, no estaría de más que aplicaras una tonificadora astringente, con un contenido de alcohol de 20 a 60 %.
Paso 3: Humecta tu piel 1 o 2 veces por día
Humectar tu piel nunca está de más, sobre todo después de que pasa por un proceso de limpieza donde eliminas prácticamente toda su grasa natural.
Humectar tu piel luego de realizar su limpieza y aplicarte un tónico ayuda a que esta se mantenga joven por mucho más tiempo. De igual forma, una piel correctamente hidratada está menos propensa a sufrir sequedad y acné.
- Aunque es bueno hidratar tu piel, te aconsejamos a que no lo hagas en exceso (máximo 2 veces al día), ya que podrías tapar tus poros y generar infecciones futuras.
Paso 4: Exfolia tu piel de 1 a 3 veces por semana
Los tratamientos exfoliantes ayudan a eliminar las células muertas y, por ende, hacen que nuestra piel se vea más joven. A su vez previenen la aparición temprana de arrugas, el padecimiento de acné y evitan la aparición de manchas producto de la vejez.
Si decides hacerte el tratamiento en casa te recomendamos lo siguiente:
- Aplica la exfoliación justo después de la limpieza. A su vez, recomendamos que luego de exfoliarte la piel apliques un producto humectante.
- Al restregar tu piel, no es necesario que apliques fuerza. Basta con masajear el exfoliante suavemente y durante 1 o 2 minutos seguidos. Si vas a exfoliar tu piel con una toalla, asegúrate de que esta esté limpia y libre de bacterias.
- Las mascarillas exfoliantes también son una buena opción, aparte de las cremas granulares. Tan solo ten cuidado de no presentar ninguna reacción adversa a estos productos. De ser así, tendrás que suspenderlos de manera inmediata.
Paso 5: Hazte un masaje facial mensual para que la piel se vea mejor
El cuidado básico de nuestra piel consiste en la limpieza, exfoliación y humectación. Sin embargo, un masaje facial al menos una vez al mes es una opción maravillosa para mantener nuestra piel mucho más viva y joven.
En caso de que esté en tus posibilidades, te recomendamos que asistas a un especialista por un masaje facial. De esta manera estimulas la circulación y el buen estado de tu piel.
Cortesía: mejorconsalud.com