El Coliseo de la capital italiana no conoce de paz: se habituó a ser sede de batallas encarnizadas, ejecuciones públicas; a oler sangre. En el horizonte del FC Barcelona se muestra este como su siguiente parada en el camino hacia la gloria de la Champions League en Kiev; los catalanes quieren luchar contra la naturaleza del recinto.
La Roma se recarga en el apoyo de los suyos para mantener viva su esperanza de remontar el 4-1 que le endosó Barcelona en la Ida de los Cuartos de Final de la Liga de Campeones de Europa. No obstante, la lógica dice que los visitantes tienen medio pie en la antesala de la Final de este torneo.
De entrada, los capitalinos requieren vencer por 3-0 para eliminar a los culés; a su favor juega el tanto conseguido en el Camp Nou.
Son las estadísticas las que le dan algo de aliento a la Loba, de salir avante ante los culés del astro argentino Lionel Andrés Messi Cuccittini: los catalanes nunca la han vencido en sus únicas 2 visitas a Roma (empate a 1 gol y caída 3-0) en la Champions League. Cabe destacar que estas batallas se dieron en la Fase de Grupos de las ediciones 2015-2016 y 2002-2003 respectivamente.
Además, Barcelona acarrea una extraña malaria desde hace 2 temporadas en la Liga de Campeones de Europa: ha sido incapaz de superar la ronda de los Cuartos de Final. Primero fue el Atlético de Madrid el que los noqueó; después, la Juventus de Turín.
Si bien los números indican tendencias inobjetables, el presente influye con igual o mayor fuerza en el desarrollo de los cotejos. Este indica que los blaugranas llegan en mucho mejor estado de forma que los giallorossi.
Los primeros son líderes incontestables de la Liga española, se perfilan para ganarla al presumir actualmente 11 puntos de diferencia para con su más cercano perseguidor. Los segundos mordieron el polvo en su último partido, ante Fiorentina, y por consecuencia cayeron al cuarto peldaño de la Serie A; incluso, su participación en la próxima Champions League está comprometida.