Isao Takahata, cofundador de Studio Ghibli y director de películas como ‘La tumba de las luciérnagas’, ‘Recuerdos del ayer’ y ‘El cuento de la princesa Kaguya’ y de series como ‘Heidi’, ‘Marco’ y ‘Ana de las Tejas Verdes’, ha muerto este jueves 5 de abril en un hospital de Tokio a los 82 años. De acuerdo a varios medios locales, el cineasta padecía cáncer de pulmón.
La noticia la dio a conocer Toshio Suzuki, productor de Studio Ghibli, que también ha anunciado que el 15 de mayo el estudio hará una despedida pública. Isao Takahata nació en Ise, en la prefectura de Mie, el 29 de octubre de 1935. Licenciado en literatura francesa por la Universidad de Tokio, su interés por la animación vino tras ver ‘El rey y el ruiseñor’, dirigida por Paul Grimault en 1952. El director comenzó su carrera en Toei Animation, en 1959, donde conoció al que sería su gran amigo y socio, Hayao Miyazaki. En Toei ejerció de ayudante de dirección hasta que en 1968 dirigió su ópera prima, ‘Las aventuras de Hols, el príncipe del Sol: La princesa encantada’.
Debido a la mala recepción por parte del público de la película, Takahata abandona Toei junto con Hayao Miyazaki y Yoichi Kotabe y se unen a Shin-Ei Animation para empezar a producir una película de ‘Pippi Calzaslargas’, la mítica novela de la escritora sueca Astrid Lindgren. Sin embargo, el proyecto no se lleva a cabo y Takahata, tras dirigir unos cuantos episodios de ‘Lupin III’, entre 1972 y 1973, lanza dos cortometrajes que, en Occidente, fueron distribuidos en una película-compilación titulada ‘Las aventuras de Panda y sus amigos’.
Director de series míticas como ‘Heidi’, ‘Marco’ y ‘Ana de las Tejas Verdes’
En 1974 dirige la que será su primera obra reconocida, la serie de ‘Heidi’. Producida por Nippon Animation bajo el sello World Masterpiece Theater, la ficción, basada en la novela de la suiza Johanna Spyri, fue un éxito en todo el mundo gracias a una narración cercana al costumbrismo y que se alejaba del género de la acción o la fantasía, ofreciendo un estilo de animación completamente diferente.
El éxito de ‘Heidi’ le lleva a dirigir dos series más para World Masterpiece Theater: ‘Marco’, basada en el relato ‘Marco, de los Apeninos a los Andes’ del escritor italiano Edmondo de Amicis, que fue otro gran éxito de público y crítica al tener un estilo narrativo similar al de ‘Heidi’; y ‘Ana de las Tejas Verdes’, basada en la novela homónima de la autora canadiense Lucy Maud Montgomery y que logró también un importante reconocimiento internacional. Fuera del sello World Masterpiece Theater, Takahata dirigió otra ficción para Nippon Animation, ‘Conan, el niño del futuro’, que fue emitida por NHK y que también pudo verse en España.
El inicio de Studio Ghibli y ‘La tumba de las luciérnagas’, su gran obra maestra
Como director de largometrajes, tras ‘Las aventuras de Hols, príncipe del Sol: La princesa encantada’ y ‘Las aventuras de Panda y sus amigos’, Takahata tardó ocho años en volver a producir otra película. En 1981 dirigió ‘Jarinko Chie’, basada en el manga de Etsumi Haruki y que, posteriormente, derivó en una serie de animación de la que Takahata dirigió varios episodios. En 1982 realizó un nuevo largometraje, ‘Goshu, el violonchelista’, basada en el relato corto de Kenji Miyazawa. Ese mismo año estuvo a punto de dirigir también ‘El pequeño Nemo’ pero, por diferencias creativas, el proyecto no se llevó a cabo.
En 1984 produjo la segunda película de Hayao Miyazaki, ‘Nausicaä del Valle del Viento’, considerada la piedra angular de Studio Ghibli, ya que gracias a su éxito se pudo fundar la factoría. Con una gran carrera a sus espaldas, Takahata aceptó con entusiasmo la idea de crear un estudio de animación en el que ambos [Miyazaki y Takahata] tuviesen mayor libertad creativa. Tras el triunfo de ‘Nausicaä’ en la taquilla japonesa, en 1986 produjo ‘El castillo en el cielo’, dirigida por Miyazaki y que también fue un éxito entre crítica y público. En 1988 debutó como realizador dentro de Ghibli con ‘La tumba de las luciérnagas’, basada en el relato homónimo de Akiyuki Nosaka. Premio por los Derechos de los Niños en el Festival de Chicago de 1994, es considerada una de las obras maestras de Ghibli y, en palabras del desaparecido crítico Roger Ebert, «una de las mejores y más poderosas películas sobre un conflicto bélico». La revista Time Out la incluyó en su lista de las 100 mejores películas de animación de la historia.
‘Recuerdos del ayer’ y ‘El cuento de la princesa Kaguya’, su último legado
Posteriormente, en 1991, dirigió y escribió ‘Recuerdos del ayer’, basada en el manga de Hotaru Okamoto y Yuko Tone, con la que vuelve a su vena costumbrista y en la que se aprecia la influencia del cine de Yasujiro Ozu y Mikio Naruse. Es considerada también otro de los grandes éxitos del estudio, en su vertiente más realista, y también incluida por la revista Time Out como una de las «mejores películas de animación de la historia». En 1994 dirigió ‘Pompoko’, ganadora del premio Cristal en el Festival de Animación de Annecy, galardonada con el premio al mejor filme de animación en los 49º Mainichi Film Awards y seleccionada por Japón para representar al país en la categoría de Mejor película de habla no inglesa en los premios Oscar.
Su siguiente largometraje, en 1999, fue ‘Mis vecinos los Yamada’, basada en la tira cómica homónima de Hisaichi Ishii. Aunque en 2003 colaboró con el filme ‘Winter Days’, pasaron 14 años hasta que Takahata estrenase el que fue su último largometraje para Ghibli y su despedida final, ‘El cuento de la princesa Kaguya’. Basada en la fábula popular de ‘El cuento de cortador de bambú’, el filme volvió a mostrar su carácter innovador y vanguardista, con un estilo narrativo y, sobre todo, de animación completamente distinto a cualquier obra de Ghibli vista anteriormente. Considerada una obra maestra contemporánea, la cinta fue exhibida en la Quincena de Realizados del Festival de Cannes y en la sección Perlas del Festival de San Sebastián, la película fue nominada al Oscar al mejor filme de animación.
Cineasta costumbrista con animación de vanguardia
Su última colaboración cinematográfica fue como productor artístico de ‘La tortuga roja’, la ópera prima del neerlandés Michaël Dudok de Wit, premio especial en la sección Una Cierta Mirada del 69º Festival de Cannes y nominada al Oscar al mejor filme de animación. Takahata también era promotor de que Ghibli distribuyese varias películas de animación extranjeras como ‘Kirikú y la bruja’ y ‘Los cuentos de la noche’ del francés Michel Ocelot o la española ‘Arrugas’, de Ignacio Ferreras.
Condecorado como Oficial de la Orden de las Artes y las Letras del gobierno de Francia y reconocido con un Leopardo de Oro honorífico por toda su carrera en el Festival de Locarno, recientemente se realizó un ciclo cinematográfico en su honor en el Caixa Fórum de Madrid. Pese que Isao Takahata no era animador, su vocación como cineasta le llevó a explorar formas narrativas diferentes dentro de la animación, con un estilo costumbrista cercano al cine de Ozu, Mizoguchi y Naruse, así como también tuvo de referencia a animadores internacionales como Paul Grimault, Jean-François Laguionie y Lotte Reiniger, así como también de artistas japoneses de la era Edo como Hokusai. Así como también ha sido influencia para importantes realizadores como el propio Hayao Miyazaki, Michel Ocelot, Lee Unkrich o Tomm Moore.