La industria de la moda ha hecho que el concepto de belleza cambie con los años y sin duda alguna, la gente se ve afectada por la presión social. Miles de chicas se han hecho implantes de silicón para verse mejor y para sentirse bien consigo mismas. No obstante, este invento se hizo en el año 1962, y antes de ese gran acontecimiento se tenían distintas maneras para aumentar el tamaño del pecho femenino. En este artículo te contaremos algunas cosas que se hacían en décadas pasadas y que ahora sería una locura pensar en ello. ¡No te lo pierdas, estamos seguros que se te hará muy interesante!
En la actualidad el aumento de pecho ha sido uno de los procedimientos más solicitados del área de la cirugía plástica. Aunque es un procedimiento muy bien conocido hoy en día, antes era totalmente imposible pensar en esto. Gracias al invento de los implantes de gel de silicón, muchas chicas han disfrutado de este gran cambio físico. Los responsables de esto fueron el doctor Thomas Cronin, y Frank Gerow. Siendo el primer caso una voluntaria llamada Timmie Jean Lindsey.
Corsé y aceites
En el siglo XIX se creía que con el uso de corsé ayudaría a que el busto aumentará, sin embargo, esto era contraproducente, pues los aplastaba y deformaba. De esta forma, dicho efecto dejaba mucho que desear a las chicas que lo intentaban. Después, se volvió una moda utilizar cosas naturales para lograr que el tamaño fuera mayor. Se comenzaron a usar remedios como la manteca de coco o el aceite de oliva para que su contorno se viera de una mejor manera. No obstante, en realidad esto no ayudó tampoco.
Ventosas
En Francia se implementaron distintos métodos que hoy en día son rechazados completamente, usaban ventosas en el busco y estos hacían una gran presión con el aire. Además de esto, el agua hacía que las fibras musculares de las glándulas mamarias se contrajeran, sin afectar otras áreas importantes. No obstante, este efecto era tan solo por unas horas y se dice que era sumamente doloroso, así que se dejó de intentar en los años 60’s, cuando se empezó a pensar sobre los implantes de silicón.
La dieta era otra de las cosas que tenía a las chicas preocupadas, pues se les hizo creer por muchos años que una dieta alta en azúcar las ayudaría a conseguir pechos más grandes. Lo cierto es que no era mentira, era seguro que conseguirías más grasa, y probablemente el busto aumentaría aún más. Sin embargo, también todo lo demás, así que no tenía los resultados que todas quisieran haber tenido. Se creía que el chocolate, la soda y todo tipo de dulces les darían esa meta que siempre esperaron.
Muchas chicas en la actualidad hacen este tipo de procedimientos para lograr satisfacer sus creencias de que la belleza externa es lo más importante. No obstante, miles lo han hecho por otro tipo de problemas, además del estético, por ejemplo, las víctimas del cáncer de mama, quienes han luchado y vencido la enfermedad, y quieren sentirse mujer aún después de haber perdido su pecho natural. Por lo tanto, este descubrimiento ha salvado a numerosas mujeres a través de la historia. Si te ha gustado este artículo no dudes en dar «Me gusta» en nuestra página de Facebook y compartirlo con todos tus amigos.
Fuente: Twitter 1 /Instagram/ Pexels